http://tribunafeminista.org/2016/04/meterse-en-el-ejercito-para-intentar-convertirlo-en-una-maquinaria-pacifista/
¿Meterse en el ejército para intentar convertirlo en una maquinaria
pacifista?
Dos lesbianas (cuyos nombres omito aunque han salido
publicados en la prensa) organizaron el bautismo de su bebé en la iglesia de
Santa Rita de Cassia, en Telde (Gran Canaria). El cura solo dejó subir al altar
a la madre biológica.
La madre despechada dice estar en estado de shock. Y acusa
al cura de "homófobo".
A mí me deja, no en estado de shock, pero sí estupefacta que
a esas dos mujeres les sorprenda la actitud del cura ¿no sabían que, en efecto,
la iglesia católica (no solo ese cura en concreto sino la iglesia como
institución) es homófoba?
¿Inscriben a su inocente e inconsciente bebé en una
asociación sin conocer mínimamente la doctrina que sustenta y propaga? Y digo
mínimamente porque si algún terreno la iglesia es clara y predica abierta y
machaconamente su doctrina es en lo relativo al sexo…
Así, Jesucristo dijo: "Es más fácil para un camello
pasar por el ojo de una aguja, que para un rico entrar en el reino de
Dios." (Marcos 10:25) pero ¿cuál es la aplicación doctrinal de la iglesia
sobre estas palabras? Exacto: no se sabe, o, como mucho, vaguedades. No hay
textos que proclamen: “Las palabras de Jesucristo manifiestan que es imposible
salvarse y ser rico. Los que lo sean deben dar todos sus bienes o, en caso
contrario, los excomulgamos”. O que digan: “A partir de tal cantidad de
ingresos se comete pecado venial y a partir de tal otra, mortal”. Ni que digan:
“Puedes ser rico de nacimiento (de “vicio” ya es más peliagudo). No es culpa tuya
pero para salvarte, debes vivir como si no lo fueras, sin tocar tus cuentas
millonarias, sin tus palacetes, ni tus yates”.
El evangelio se puede interpretar de muchas maneras. La
iglesia católica lleva siglos interpretándolo y generando doctrina. Ha elaborado,
pues, una moral con minuciosa escala de pecados veniales y mortales, penas,
excomuniones, anatemas, etc. (y en los aspectos en lo que no la ha hecho -en el
asunto del dinero, por ejemplo- el mensaje también está claro: no es tema
importante, ancha es Castilla).
La iglesia, como cualquier otra institución, tiene perfecto
derecho a elaborar su interpretación del evangelio y a darse a sí misma su
propio código moral. Puede, por lo tanto, decirles a sus fieles lo que deben o
no deben hacer: si ir a misa, si ayunar, si guardar las fiestas, si tener esta
actividad sexual o no tenerla, etc.
Y yo puedo, por supuesto, juzgar como buenos o malos esos
principios pero no puedo poner en tela de juicio su licitud para tenerlos.
¿Qué no debe hacer la iglesia?
1. Imponer sus
normas a quienes no pertenecemos voluntariamente a ella. Ni pretender que la
sociedad civil respete sus mandamientos. Ni tampoco detentar privilegios, ni
ser financiada por el estado, etc.
2. Tener normas
que contradigan los derechos humanos. Así, por ejemplo, no puede castigar los
pecados con torturas físicas (con las psicológicas tampoco pero esa son más
difíciles de detectar…). Y, por supuesto, un Estado como el nuestro, cuya
constitución declara la igualdad entre hombres y mujeres, no debería consentir
que la iglesia vete el acceso a ciertos puestos en razón del sexo. Creo que merece
un ultimátum: “O acatan la constitución, o los declaramos ilegales”.
Con esas salvedades, la iglesia tiene todo el derecho a
exigir de sus fieles tales o cuales conductas.
Alguien puede creer en el mensaje del evangelio y no estar
de acuerdo con la interpretación que de él hace la iglesia, pero, entonces ¿por
qué se empeña en pertenecer a ella?
Ya sé que hay gente que quiere cambiar la iglesia desde
dentro… Es como afiliarse al PP creyendo que conseguirá transformarlo en un
partido de corte socialista. Es como meterse al ejército para intentar
convertirlo en una maquinaria pacifista… Pues bueno… es una opción; libre cada
cual de tenerla pero no sé hasta qué punto pueden quejarse luego si el coronel
los arresta por no querer llevar fusil…
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